28 octubre, 2012

Producción de alimentos ecológicos y convencionales

¿Por qué los alimentos orgánicos son mas costosos?  



Siempre han existido mercados de productos íntegramente naturales. Desde verduras hasta carnes animales, estos alimentos son cultivados y procesados sin el uso de sustancias químicas que afecten de cualquier manera su desarrollo. Siendo este proceso “natural“ los alimentos en teoría deberían ser mejores, pero este criterio está sujeto a características como el sabor y el precio. Los procesos industrializados, en cambio, se enfocan en lograr máxima producción al menor costo. 
Entonces nos planteamos: 

¿Qué implicaciones tienen los actuales procesos convencionales (industrializados) para proveer de alimentos al grueso de la población mundial? 

¿Cómo se comparan los procesos tradicionales para producir alimento con los procesos orgánicos?

Como ya mencionamos, los vegetales y frutas orgánicas son cultivados y elaborados omitiendo el uso de sustancias químicas ajenas como insecticidas y herbicidas, lo que en teoría resulta en un producto libre de químicos que podrían ser nocivos. El verdadero reto está en la producción en masa; el proceso orgánico es más lento y es difícil garantizar grandes cantidades de producto precisamente porque no se usan químicos. 

Los pesticidas involucrados en la producción industrial de alimento son inofensivos para el consumo humano, y solo pueden resultar peligrosos cuando interactúan con otras sustancias; además, están diseñados para mantener los cultivos en condiciones ideales, maximizando así la producción y asegurando costos mínimos. Los cultivos orgánicos, en desventaja, deben enfrentar el costo que sugiere la pérdida por causas naturales, de un porcentaje de su pequeño cultivo, comparativamente hablando. Las granjas orgánicas deben entonces cubrir esa pérdida de producto aumentando el precio de venta. Siendo esta la primera razón de porqué lo orgánico es más caro.

Existen otros factores que aumentan el costo de los comestibles naturales, por ejemplo: no es comparable el alimento que consumen los animales de granjas convencionales con el alimento que deben consumir los animales de granjas orgánicas, el último puede costar hasta dos veces más que el convencional por su baja demanda. También están los fertilizantes, que para los alimentos de producción masiva son más baratos debido a su composición química; el abono usado en granjas ecológicas es natural, básicamente compost y desecho animal, pero si este abono no se produce en cantidad suficiente en la misma granja orgánica, implica un gasto de envío mayor que lo que comprendería importar fertilizantes químicos.

El costo también puede aumentar en el proceso de venta final del producto. Los cultivos convencionales pueden ser enviados en grandes cantidades, cosa que lógicamente un proveedor grande de alimentos desea. Los cultivos orgánicos no pueden enviarse junto con el producto procesado, a fin de evitar la contaminación cruzada. Para cualquier proveedor de alimentos  resulta menos rentable comprar menor cantidad de producto a mayor costo. Sobre todo cuando los alimentos convencionales aparentan las mismas características y cuentan con mayor tiempo de vida, una altísima ventaja sobre los comestibles orgánicos.



Veredicto:
La comida industrializada está planteada para maximizar la producción al menor costo. Gracias a esta, obtenemos un producto más barato y de relativa calidad inferior. Los alimentos orgánicos tienen propiedades alimenticias ligeramente superiores, pero muchas veces su elevado precio final no nivela la relación precio-calidad.

Los mercados y tiendas de comestibles orgánicos representan la milenaria tradición de alimentarse de lo que la tierra nos da. Son excelentes opciones para esa minoría que agradece la virginidad de sus alimentos y pueden costearlos. Pero definitivamente no son una solución para abastecer a la cada día más grande población humana.